El escultor cordobés Marco Augusto Dueñas coloca su segunda estatua en el Vaticano
- La pieza mide 5,40 metros de altura y pesa 25.000 kilos
- La estatua de mármol representa a San Marón, fundador de la Iglesia Maronita
- La escultura será colocada en marzo tras su bendición por Benedicto XVI
- La otra obra suya en el Vaticano es una de la santa española Rafaela Porras
Un estatua de San Marón, fundador de la Iglesia Maronita, obra del escultor español Marco Augusto Dueñas (Córdoba 1971), será colocada en una hornacina externa de la parte posterior de la basílica de San Pedro del Vaticano, la segunda de este artista que se instala en el Vaticano.
Se trata de una escultura de 5,40 metros de altura y 25.000 kilos de peso, obtenida de un bloque de mármol de Carrara (centro norte de Italia) de 70 toneladas.
La estatua fue solicitada por la Iglesia Maronita, de rito oriental en comunión con Roma, con motivo del Sínodo de Obispos para Oriente Medio, que se celebra en estos días en el Vaticano y al que asisten todas las iglesias católicas de rito latino y oriental presentes en esa zona del mundo, donde los cristianos son una minoría.
Según datos facilitados durante el sínodo por el patriarca copto de Alejandría, de Egipto, Antonio Naguib, los cristianos en Oriente Medio son el 1,6 por ciento de la población y viven entre la mayoría musulmana y los judíos.
La estatua será colocada en marzo próximo, una vez concluidas las obras de la fachada y habiendo sido bendecida por Benedicto XVI, y con su colocación quedarán cubiertas todas las hornacinas existentes en la pared, en las que han sido colocados santos de los últimos siglos.
La obra representa a San Marón con los hábitos de su iglesia. En la mano izquierda lleva una pequeña iglesia de estilo maronita, que ofrece al mundo. En la derecha lleva una vara pastoral.
La estatua también lleva una estola larga, que le llega casi a los pies, donde están escritos en árabe algunos de sus pensamientos.
Marco Augusto Dueñas expresó su satisfacción por haber sido elegido de nuevo para esculpir una estatua que será colocada en el Vaticano, y destacó que es la primera vez que un escultor español coloca dos obras suyas en el templo centro del catolicismo. Hasta ahora no había ninguna obra de un escultor español en el Vaticano.
La otra estatua suya es una de la santa española Rafaela Porras (Pedro Abad, Córdoba,1850-Roma, 1925), fundadora de la congregación de las Esclavas del Sagrado Corazón de Jesús, colocada asimismo en una hornacina externa de la parte posterior de la basílica de San Pedro.
La estatua fue bendecida el 20 de enero de este año por el Papa, quien en la ceremonia exhortó a todos los fieles a seguir el ejemplo de la santa española y a dar testimonio del amor misericordioso de Dios.
Las dos esculturas se unen a las de otros santos españoles que también adornan la inmensa pared posterior del templo vaticano, entre ellos el fundador del Opus Dei, Jose María Escrivá de Balaguer; María Josefa del Corazón de Jesús (Josefa Sancho de Guerra), el padre Mayanet y Genoveva Torres Morales.